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¡¡¡ESTOY DE VACACIONES!!! 
Sí, soy de esas afortunadas que tienen vacaciones fuera de temporada, ¿qué pasa? ¿Es envidia lo que noto por ahí? No vuelvo a pisar la ofi hasta el próximo lunes, y contando con que el martes es fiesta, no creo que la semana se me haga cuesta arriba.
Hoy tenía ganas de actualizar, pero mi única historia interesante es que he ido al oculista y resulta que tengo un 120% de visión (cosa que la mayoría ya sabéis, porque llevo restragándooslo por la cara todo el día, panda de topos!)
Pero aun así quería escribir algo, y se me ha ocurrido rescatar una nota que publiqué en Facebook hace siglos, con 25 COSAS CURIOSAS QUE ALGUNO DE VOSOTROS NO SABE SOBRE MÍ, y que puede que os llamen la atención. Es una forma fantástica de encontrar tema de conversación cuando me tengáis delante...........


1. Colecciono sombreros de los países a los que viajo. Bueno, decir colección es un poco pretencioso, pero me gusta comprarlos, y tengo un gorro chino de paja, una canotier de gondolero veneciano, un panamá de Ecuador, una gorra de baseball de Boston, un sombrero de cowboy del Cañón del Colorado, un sobrero de peregrino de Santiago...

2. De pequeña me encantaba el brócoli (en aquella época en la que aún se llamaba BRECOL!!!). Ahora lo aborrezco.

3. A pesar de todo lo que viajo, los despegues y aterrizajes (sobre todo los despegues) me dan pánico. Lo intento disimular lo mejor que puedo, pero la verdad es que me agarro al brazo del asiento como si eso me fuera a salvar en caso de que el avión se cayera!!

4. Puedo dormir a cualquier hora del día en cualquier sitio. Y creo que si me lo propusiera podría hacerlo de pie, sobre mis zapatos de la talla 41.

5. Empecé a cantar en el coro del colegio porque me enamoré perdidamente de un tenor! Él era mayor que yo y ni se percató de mi existencia, pero a mi me volvia loca. Él desapareció, pero mi amor por la musica coral sigue hasta hoy.


6. En el comedor del colegio escondía la comida en servilletas que metía detrás del radiador para no tenermela que comer. ¡Estaba malísima! No me quiero imaginar la cara de quien limpiara los radiadores y se encontrara con mis regalos.......

7. Aprendí a conducir coches automáticos en Jordania, gracias al señor que trabajaba en la oficina de Europcar que estaba junto a mi hotel en Amman. Quería alquilar uno, no tenían modelos manuales, y el señor tan simpático cerró la oficina un rato y salió conmigo por las calles de Amman para enseñarme a conducir. Si he sido capaz de conducir allí y seguir con vida, ya no hay carretera o ciudad que se me resista. ¡¡Y sin GPS!! Para que luego digan eso de "mujer tenía que ser", me encantaría veros a vosotros en esa situación!

8. Hablando de GPS, mi orientación es pésima. Llevo 24 años viviendo en Madrid, y todavía no sé dónde está la glorieta de Quevedo ni como llegar hasta ella. Sin embargo, si me das un mapa y me sueltas por una ciudad desconocida, te llevo donde quieras. Soy la reina de los mapas.

9 . No me gustan nada los peluches. NADA. Me parecen de lo más cursi y creo que son un regalo espantoso. Si alguien por ahi está pensando en regalarme uno, mejor cambiadlo por un libro o una botella de vino (dos cosas que me encantan y que nunca nadie me regala!)


10. Soy un desastre en la cocina. Un DESASTRE con mayúsculas. No sé ni freir un huevo. El año pasad traté de hacer una tortilla de patatas en casa de una amiga en USA, y lo que nos salió fue UN huevo medio revuelto con media patata, todo pegado a la sartén. Acabamos comiendo muffins, que nos salieron riquisimos (porque no tenía más misterio que mezclar unos polvos con leche en un molde!!)

11. Adoro EEUU, y mi sueño es coger un año sabático y dedicarme a recorrer el país en un coche descapotable :) En plan Thelma & Louise. ¿Alguien quiere ser mi Louise por la Ruta 66?

12. De pequeña quería ser actriz, y estuve dos años en la escuela de Teatro de Cristina Rota. A principios del segundo año tuve una escena de improvisación con una chica que se me tiró encima y no me dejaba respirar. Me agobió tanto y lo pasé tan mal que nunca más volví a la escuela. Ahí se terminó mi carrera como actriz!!! Aqui no estamos para sufrir!!

13. Antes de querer ser actriz, quería ser GUARDA FORESTAL. No me preguntéis por qué porque ni yo misma lo sé.

14. No sé silbar.

15. De pequeña, como todas las niñas, di clases de ballet. En mi escuela, además de baile clásico, se aprendía baile contemporáneo y CLAQUÉ. Lo confieso: he salido a un escenario con minifalda de lentejuelas, pajarita dorada y bombín bailando claqué, y hay fotos...............!!

16. Cuando aún no sabía leer, mis padres me contaban cuentos que tenía en casa. Me los leían tantas veces que me los aprendía de memoria, hasta tal punto que si en algún momento decían una palabra que no estaba en su sitio, o se comían una frase, me daba cuenta y les regañaba! ¡Con 4 años!


17. Odio el tabaco. Mercedes Milá a mi lado es una blanda. No lo soporto, me da un asco que me muero. Lo aborrezco con todas mis fuerzas. Además tengo un olfato finísimo, y detecto el olor a humo a un radio gigante, no lo puedo evitar.

18. Me encanta la serie Sexo en NY. La he visto mil veces, me compré la peli en EEUU antes de que saliera en España. Confieso que me sé algunos diálogos. Freak....

19. Me encantan los carteles antiguos, sobre todo los de chapa. En mi cuarto tengo varios colgados, e incluso tengo una matrícula usada del Estado de California que compré en Can Francisco. Allí tengo fichada una tienda cerca del puerto donde venden estos carteles con anuncios antiguos de Coca-Cola, nombres de calles, matrículas... Y cada vez que voy no puedo evitar pasar y llevarme varios! Luego tardo un siglo en colgarlos, pero aún así los compro.

20. Duermo con el Ipod encendido. Me meto en la cama, me planto los cascos y me quedo frita. A la mañana siguiente aparezco medio estrangulada por el cable, pero si no escucho música no hay forma de dormirme...


21. No me gusta el sushi. Por mucho que esté de moda, es pescado crudo y es asqueroso. Una vez un ligue me quiso impresionar llevándome a un restaurante japonés y pidió maquis (de estructura muy similar al sushi, e igual de asqueroso en mi opinión). Aquello tenía un tamaño descomunal y me pareció poco femenino meterme aquello en la boca, así que decidí meter el cuchillo y cortarlo para poder comerlo mejor. El chico se quedó alucinado, hizo algún comentario sobre mi falta de respeto hacia los maestros cocineros de sushi que tardaban años en aprender a preparar aquello, y no volvimos a vernos después de esa cena. Eso no habría pasado si me hubiera llevado a comer jamón y se hubiera dejado de pijadas.

22. Me sé de memoria (y todavía canto) el himno del campamento al que iba de pequeña. ¡PEÑASBLANCAAAAAS ES UN LUGAAAAAR DONDE TODOOOOS QUIEREN ESTAAAAAR!

23. La última vez que estuve en NYC fui a patinar sobre hielo a Rockefeller Center. Creo que es una de esas cosas que hay que hacer en la vida, como beber cerveza en la Oktoberfest o ver la Semana Santa en Sevilla (estas últimas me faltan todavía)

24. Me falta viajar a Oceanía para visitar los 5 continentes.

25. Aunque soy diestra, llevo siempre el reloj en la muñeca derecha.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

María! Te echo mucho de menos!! Me encanta el número 10 de tu entrada... :) Ya sabrás cocinar mejor algún día...estoy segura, y mientras tanto, cuenta conmigo para los muffins...jaja. Muchos besos desde la cocina americana.

Carlos dijo...

Eres alucinante. Yo podría contar algunas anecdotas, pero solo contaré una. Yo en el comedor del colegio me lo comía prácticamente todo. Pero las habas estaban fuera de mis gustos. Aun recuerdo el día en el que un padre regalo al director del colegio u. Saco gigante de habas. El debería tener las mismas ganas de comerselas que yo, por que a su vez el se las dono al colegio. Comimos habas de todas las formas y de iguales colores. Si estuviera aquí BUBA el amigo de Forest Gamp seria capas de narrar 20 formas, yo recuerdo las tortillas de habas. Como yo otros niños nos dedicamos a darles boleto por la ventana. Fuimos capaces de reunir a tres o cuatro galgos que daban buena cuenta de las tortillas. ( los galgos terminaron que parecían mastines),
Cambiando de punto y si no se me adelantaran otros, me encantaría recorren EEUU en un descapotable contigo, en un principio lo del descapotable me echaba para atrás, pero sabiendo que tienes sombreros de todos los colores, alguno se podría adaptar, no? Jajaja!!!

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